INTERNACIONALES||
Estados Unidos se quedó aislado, una vez más, ante el repudio casi universal a su política contra Cuba, con 184 países de los 193 integrantes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) votando a favor de la resolución de la Asamblea General para poner fin al bloqueo impuesto hace casi 60 años contra la isla.
Es la vigésima novena vez en que la Asamblea General de la ONU vota de manera abrumadora contra la política estadunidense hacia Cuba (no hubo votación en 2020 por la pandemia), pero en esta ocasión hubo un poco de suspenso sobre si Washington se abstendría, como lo hizo por primera vez en 2016 en el gobierno de Barack Obama, como parte de su intento por normalizar la relación bilateral.
Pero el nuevo gobierno de Biden –con el cálculo político definido más por Miami que por la relación bilateral con La Habana, y en contra del consenso de esa comunidad internacional de la cual se proclama líder– por ahora decidió refugiarse en la línea dura de su antecesor Donald Trump en el tema de Cuba.