
REDACCIÓN @mundomujeres ALTO AL GENOCIDIO EN GAZA
Al referirse a la fragmentación de los territorios palestinos ocupados, la expansión de los asentamientos, la violencia de los colonos israelíes contra los palestinos, la demolición de viviendas y los desplazamientos forzados de población palestina, subrayó la ilegalidad de la anexión progresiva de la Cisjordania ocupada.
Tras mencionar el apoyo de la Knéset a esa anexión, Guterres fue categórico: “Seamos claros: la anexión progresiva de Cisjordania ocupada es ilegal. Debe acabar”.
Las acciones unilaterales que socavan para siempre la solución de dos Estados son inaceptables y deben cesar

Imagen ONU_Mark Garten
Líderes mundiales reunidos en la sede de la ONU para impulsar la implementación de la solución de dos Estados: Palestina e Israel.
El conflicto israelí-palestino continúa cobrando vidas, destruyendo futuros y desestabilizando la región y el mundo, pero tiene arreglo, asevera el titular de la ONU, advirtiendo que hace falta voluntad política y un liderazgo valiente. Una vez más, insiste en que la solución de dos Estados es la única vía hacia una paz justa y duradera. La sede de la ONU acoge una reunión de alto nivel para impulsar esa hoja de ruta.
La solución de dos Estados está más lejos que nunca, pero esta cruda realidad nos obliga a redoblar los esfuerzos para alcanzarla, dijo este lunes el Secretario General de la ONU, reconociendo los desafíos que supone el conflicto israelí-palestino a la diplomacia y el derecho internacional.
António Guterres participó en la Conferencia de Alto Nivel para la implementación de la solución de dos Estados, organizada por los gobiernos de Francia y Arabia Saudita en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.
“Sabemos que el conflicto continúa cobrando vidas, destruyendo futuros y desestabilizando la región y el mundo. Pero también sabemos que su persistencia no es inevitable. Tiene solución. Eso exige voluntad política y un liderazgo valiente. Y exige verdad”, apuntó Guterres.
Y esa verdad es que “nos encontramos en un punto crítico”, declaró durante la apertura del cónclave.
La destrucción de Gaza debe cesar
Guterres reiteró su rechazo a los ataques de Hamas al sur de Israel, pero insistió en que nada justifica la destrucción de Gaza, ni la hambruna que se ha infligido a su población, ni la matanza de decenas de miles de civiles.
“La destrucción generalizada de Gaza es intolerable y debe cesar”, enfatizó.
Los datos del Ministerio de Salud gazatí indican que más de 59.000 palestinos -18.000 de ellos, niños-, han muerto desde el 7 de octubre de 2023. Los heridos superan la centena de miles y la situación humanitaria es catastrófica debido al bloqueo a la entrada de ayuda vital a la Franja de Gaza.
Oportunidad excepcional
El Secretario General afirmó que la conferencia de hoy constituye una oportunidad “excepcional e indispensable” para impulsar la solución que ponga fin al desmantelamiento sistemático de las bases de la paz en Medio Oriente.
“Debemos asegurarnos de que no se convierta en otro ejercicio de retórica bienintencionada”, sino en un punto de inflexión que catalice un progreso irreversible hacia el fin de la ocupación y la realización de nuestra aspiración compartida de una solución viable de dos Estados, apuntó.
Dos Estados, la única vía hacia una paz justa y duradera
Una vez más, el titular de la ONU sostuvo que la solución de dos Estados es “el único camino creíble hacia una paz justa y duradera entre israelíes y palestinos. Y es la condición sine qua non para la paz en todo Medio Oriente”.
“Israel, Palestina y otros países tendrán que tomar decisiones difíciles en ese camino. Se requerirá un liderazgo audaz y con principios de todas las partes. Estamos aquí para alentar y apoyar ese esfuerzo”, concluyó.
La solución de dos Estados -basada en el derecho internacional y respaldada por
La Asamblea General de la ONU y la comunidad internacional-, y plantea la convivencia pacífica y segura de dos Estados, Palestina e Israel, dentro de las fronteras reconocidas en 1967. También establece a Jerusalén como la capital de ambos Estados.
Según ese plan, los dos Estados deben ser independientes, contiguos, democráticos y soberanos, reconocidos por todos y plenamente integrados en la comunidad internacional.