Por Fernando Castillo
Arresto administrativo hasta por 36 horas y multas hasta por 1 millón 924 mil pesos, serán las sanciones para las y los poblanos que rebasen los decibeles permitidos y provoquen molestias o daños a la salud. Las sanciones van a quienes escuchen música a alto volumen desde sus casas, bares y comercios, de acuerdo a la Ley de Atención y Prevención de la Contaminación Visual y Auditiva, aprobada por el Congreso local.
Con 34 votos a favor de los diputados locales fue aprobada la Ley de Atención y Prevención de la Contaminación Visual y Auditiva que envió el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
En su intervención el diputado del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) Jimmy Natale Uranga, expresó que con la ley establece que será la Secretaría de Medio Ambiente y los ayuntamientos quienes impondrán las sanciones, que van desde una multa, revocación, retiro de estructura y hasta el arresto.
“En materia de contaminación auditiva se regula las fuentes fijas y móviles de contaminación, es decir los ayuntamientos tendrán que regular conforme a su reglamento y la Norma Oficial Mexicana, el ruido proveniente de cualquier naturaleza, ya sean conciertos, casas, bares, comercios y hasta vehículos que circulan en la vía pública que ofrecen bienes y servicios”, puntualizó.
Por lo anterior, destacó que los 217 Ayuntamientos tendrán un periodo de 90 días naturales para adaptar el reglamento y asegurarse que la ley se aplique.
Destacó que esta ley promueve la protección del medio ambiente, y también queda prohibida la instalación de espectaculares en áreas verdes, ya sea en espacios estatales y municipales, además de que se castigarán a quien cause daño ambiental y auditivo, los infractores tendrán que reparar el daño.
Imagen e información tomada de la web de la Fonoteca
https://fonotecanacional.gob.mx/index.php/108-articulos/296-decibeles-y-efectos
* El decibel (dB) es la unidad de medida de la intensidad de un sonido. El oído humano posee un área de sensación auditiva que determina los límites de la escucha, y oscila entre 1 dB que es el umbral de audición, es decir, el sonido mínimo perceptible, y 140 dB, el nivel máximo o umbral de dolor, es decir, el momento en que la experiencia sonora se vuelve sufrimiento. La afectación al oído depende de diversas condiciones, como la intensidad, el tiempo de exposición y la proximidad de la fuente.